MAICAO MERECE QUE LO QUIERAS

Cuando hablemos de Maicaeros, debemos entender que nos referimos a todo habitante del municipio de Maicao que convive y sobrevive en este espacio geográfico; haya nacido o no en el. Esto habida cuenta que quien llega a estas tierras se enamora de ella por la inmensa generosidad que encuentra durante su permanencia. Maicao trata bien a todo aquel que decide tomarlo como su lugar permanente de habitación, pero a pesar de todo eso, el cariño reciproco real no se ve reflejado en nuestras acciones y se nos contagia la desidia y la poca consideración generalizada, que se ha anquilosado en las fibras mas intimas de nuestra conciencia colectiva y repetimos inconscientemente y de una forma autómata los actos que en nada benefician al desarrollo anhelado de nuestro terruño: tirar basuras a la calle, orinar en bolsas y regarlo en las vías, colocar un fogón en pleno anden, etc. Son actos que van en contravia del pensamiento urbanístico moderno y de la simple lógica de convivencia ciudadana.

Maicao se merece que sus habitantes lo quieran, lo consideren, lo lleven en el lugar mas especial de sus corazones y que en una forma conciente y responsable nos dediquemos a pensar de que manera nuestras acciones pueden beneficiar el desarrollo integral del municipio. Maicao será en el mañana lo que nosotros queramos que sea hoy en el presente, lo que planifiquemos y visionemos, no le dejemos esa parte tan importante de nuestra existencia al azar, hay que tomar literalmente el toro por los cuernos y plantear nuestra querencia futura sin ambages, con resolución, pensando siempre en el beneficio general que decisiones de esa magnitud traerían.

Maicao es una ciudad que merece que sus habitantes la quieran. Durante toda su existencia nos ha dado bienestar y brindado un sinnúmero de oportunidades para crecer en todos los ámbitos de la vida. Ha sido acogedora y amable con todas las personas que han decidido hacer de ella y de sus familias su “patria chica” y ha ofrecido lo mejor de sí para que todo aquel que se lo ha propuesto realice su sueño. Arrúllala, acaríciala que ella necesita saber que es importante para ti. Pero lo mas trascendental; defiéndela de quienes la atacan ya que sin una férrea defensa de nuestros intereses navegaremos a la deriva y sin rumbo fijo y es muy probable que no podamos atracar en un puerto seguro.

Hagamos de nuestra comarca el paraíso que todos algún día hemos soñado y que en muchas ocasiones hemos pregonado de nuestra tierra. Seamos unos embajadores de lujo que lleven el buen nombre de nuestra patria chica hasta el confín del mundo, hablemos bien de ella hasta el cansancio y cuando esto suceda sigamos hablando bien de ella. Iniciemos un proceso en el que todos estemos involucrados, consistente en pensar siempre positivamente de nuestra ciudad, desterremos de nuestro pensamiento el negativismo y concomitantemente con el pensamiento realicemos obras encaminadas a reafirmar nuestra actitud. Pensemos que vivimos en la mejor ciudad del mundo, que de hecho así lo es o ¿usted conoce otro lugar donde se consiga tan fácil el pan de cada día?


Que se nos hinche el pecho de orgullo cuando escuchemos las notas del himno a Maicao “Mi pampa querida” y gritemos a pulmón lleno que somos los primeros, por que por aquí comienza Colombia.


ELIÉCER QUINTERO VASQUEZ